
Los Premios de la Academia (en inglés: Academy Awards), más conocidos como los Óscar, son los premios cinematográficos otorgados anualmente cada mes de febrero o marzo por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas en Los Ángeles, California.
El premio es una estatuilla dorada que representa un hombre desnudo sosteniendo una espada que aguarda de pie sobre un rollo de película con cinco radios. Cada radio simboliza una de las cinco ramas originales de la Academia: actores, guionistas, directores, productores y técnicos. La estatuilla fue creada en 1928 por el escenógrafo de la Metro Goldwyn Mayer, Cedric Gibbons, que dibujó un boceto de la estatuilla que entregarían a los premiados. A partir de 1931 se conocería popularmente con el nombre de Óscar desde que, según se cuenta anecdóticamente, Margaret Herrick exclamó al verla que se parecía a su tío Oscar.
Lo hispano está curiosamente ligado al Premio Oscar desde su creación, y en la actualidad en su fabricación. La leyenda del cine mexicano Emilio "Indio" Fernández sirvió de modelo para su diseño, y desde 1982 trabajadores hispanos de Chicago son los primeros en acariciar las preciadas estatuillas.
Indirectamente, lo hispano ya estaba allí, puesto que Gibbons estaba casado entonces con la actriz mexicana Dolores del Río.
El escultor George Stanley de Los Ángeles fue elegido para darle la forma tridimensional, y se cuenta que el actor y director mexicano Emilio "Indio" Fernández, le sirvió de modelo.
El oficialmente denominado Premio de la Academia al Mérito mide 13 pulgadas y media (33.75 centímetros) y pesa 8 libras y media (3.9 kilogramos).
El diseño de la estatuilla nunca ha cambiado desde su concepción original, pero el tamaño de la base ha variado hasta el modelo actual, adoptado en 1945. Las 15 estatuillas entregadas en las ceremonias iniciales eran de bronce sólido y estaban chapadas en oro.
En poco tiempo se abandonó el bronce a favor del britannia, una aleación de cobre, estaño y regulo de antimonio, de aspecto similar a la plata o al peltre bruñido, que facilitó el acabado uniforme de las estatuillas.
La anécdota de la fabricación es que durante la Segunda Guerra Mundial, los Oscar se realizaron en yeso pintado durante tres años. Había que colaborar al ahorro de materiales para la producción de materiales de guerra, pero eso sí, acabada la contienda todas las figuras de yeso entregadas fueron canjeadas por otras de metal chapado en oro.
La primera ceremonia de entrega de los premios de la Academia tuvo lugar el 16 de mayo de 1929 en el Hollywood Roosevelt Hotel, transcurriendo sin sobresaltos al conocerse los nombres de los premiados desde el 18 de febrero.
Esta entrega de premios ha sido el evento esperado del año, no solo por los actores, directores, productores, etc, si no por toda la gente del mundo interesada en el cine y la moda.
Para muchas mujeres nos resulta apasionante ver desfilar a esas hermosas mujeres y apuestos hombres en la alfombra roja con vestidos de gala, accesorios de piedras preciosas, las prendas más bonitas de los diseñadores famosos, bueno tengo que decir que en algunos casos son vestimentas tan raras que jamás las voltearíamos a ver, cuestión de gustos.
Hablaré de la entrega de premios 2010, en lo particular me gustó mucho el vestido morado que uso Elizabeth Banks un Versace con volantes, a diferencia de Nicole Richie que llevó un vestido metálico de Reem Acra, creo que no es un vestido para una mujer de su edad. Qué puedo decir de la señora Meryl Streep qué lució muy elegante con un vestido blanco, un clásico de Chris March sensacional, bueno señoras tengo qué hablar de las celebridades favoritas, el vestido dorado de Cameron Díaz es un clásico de Oscar de la Renta, qué decir del elegante vestido contemporáneo de Sandra Bullock de Marchesa lucia verdaderamente hermosa.
El cuerpo envidiable de la señora Demi Moore nos mostró un vestido largo, drapeado, con volantes muy lindo de Atelier Versace en color durazno, y mi consentida Sarah Jessica Parker en un vestido Chanel Couture en color amarillo pálido digno de cualquier diosa griega.
Bueno chicas qué felicidad, pero quiero compartir con ustedes un fragmento del libro”Aprendiendo a quererse a sí mismo” de Walter Riso.
Las propagandas tienen por objetivo mostrarte cuánto te alejas de la belleza “perfecta”. Si aceptas pasivamente ese modelo de belleza, terminarás pensando qué eres horrible.
Lo correcto es destacar las cosas que realmente te agradan de ti misma y no lo que las convenciones establecen como adecuadas, lo que realmente te gusta, no lo que coincida con la “moda”.
Si tú aceptas los criterios de la moda como una necesidad vital, serás esclavo de ellos. Tu poder de decisión quedará resumido a una revista o a lo que el diseñador diga este año.
Tu cuerpo y el modo en que lo cubras deben gustarte a ti primero. Quienes entren a tu territorio lo harán porque “gustan de tu gusto”.
Vístete, píntate, adelgaza, pero para halagarte, no para halagar.
Y el show de la entrega de premios Oscar, Golden Globe, Tv y Novelas qué siga pasando cada año.